Las llaves, las gafas, el
monedero, pañuelos, el móvil, la agenda, un libro, un bolígrafo, chicles,
compresas, tampones, maquillaje, neceser, cepillo de dientes… ¿Qué más podemos
encontrar en el bolso de una mujer? Hay que reconocerlo; el bolso de Mary Poppins
no era una sátira de este complemento tan preciado para una fémina. De alguna
manera ese pequeño lugar donde guardamos tantas cosas en nuestro ir y venir del
día a día es un reflejo de nuestra personalidad, nuestros miedos y nuestros
deseos.